León llora a Salvador Armesto, el hombre que fabricaba pompas de jabón en la Calle Ancha

Salvador Armesto en una imagen de Andrés Edo Tornos y publicada en sus redes sociales.
Su mundo de imaginación y colores, ese mundo de creación y de sueños, desapareció en silencio el pasado martes tras un fallo multiorgánico

León llora a Salvador Armesto, el hombre que fabricaba pompas de jabón en la Calle Ancha. En el centro de León cuando se veía flotar una enorme pompa de jabón, viajando a favor de la brisa con sus colores cambiantes, muy cerca se encontraba Salvador Armesto.

Pero ese mundo de imaginación y colores, ese mundo de creación y de sueños, desapareció en silencio el pasado martes. Ese día un fallo multiorgánico acabó con su vida, con su arte, con sus ganas de crear, al mismo tiempo que dejaba sin compañero a su inseparable mascota Paca.

Muestras

Se había pasado en León más de dos décadas, era un trabajador de la calle, que vivió en el chalet de Los Osorios hasta que la ruina acabó con el inmueble. En las últimas semanas su vida giraba entorno al albergue Calor y Café de la Sociedad San Vicente de Paúl.

Artista callejero había cursado estudios de Arquitectura Superior en la Universidad Politécnica de Madrid durante algunos años y había trabajado en la mina cuando Laciana era fuente de carbón.

Su arte le llevó a formar parte de varias exposiciones en la ciudad, algunas vinculadas al ILC, aunque nunca buscó otra cosa que construir mundos en su entorno.

Obra artística

Con el Ayuntamiento de León realizó una de sus obras artísticas más visibles, Bosque de la  noche, en los depósitos de Agua del alto de la carretera de Asturias, aunque la rehabilitación de los mismos dejó de ser visible.

Creador, creativo, inmutable y soñador Salvador Armesto se va dejando en León un mundo de recuerdos y de sueños.