La 'Cofradía del Cocido (montañés)'

Ser cofrade siempre es un lujo, pero ser cofrade del cocido se presenta como un ministerio casi inigualable. Lo advierte Luis Alvarado Alonso, promotor de la 'Cofradía del cocido montañés', defensor del arraigo cazurro, bandera del buen comer y padrino de las tradiciones locales.

Casi seis años atrás, a través de los grupos de whatshap creados en su teléfono, él se dedicaba a potenciar este lujo gastronómico. "Hacía quedadas, informaba de dónde se daba cocido montañés y difundía los restaurantes que apostaban por este menú", asegura.

Pero fue hace dos años y medio cuando decidió dar un paso al frente y fundó la 'Cofradía del Cocido Montañés', a la que hoy pertenecen 120 socios, o amigos, que sin cuota pero con mucho poder de convocatoria se juntan cocido a cocido para defender y promover "un plato único, bandera de la Montana Oriental leonesa".

Desarrollo económico, turístico y cultural.

De este modo la Montaña Oriental Leonesa suma un nuevo ingrediente a su receta de promoción territorial con el nacimiento de la Cofradía del Cocido Montañés, una iniciativa que busca convertir la tradición culinaria en motor de desarrollo económico, turístico y cultural.

La nueva asociación nació con una ambiciosa hoja de ruta: poner en valor la riqueza gastronómica local —con el emblemático cocido montañés como estandarte— y proyectar al exterior el potencial natural, patrimonial y social de la comarca, tomando como punto de partida la ya consolidada Ruta del Cocido Montañés, que reúne a más de 30 restaurantes de la zona.

Alvarado, el motor

Luis Alvarado, impulsor del proyecto, destaca que esta Cofradía no solo busca ensalzar un plato típico, sino convertirse en catalizador de nuevas oportunidades. "Es una herramienta para dar visibilidad a lo que somos y a lo que tenemos: nuestros productos, tradiciones, rutas, montañas y cultura", señala.

La iniciativa contempla la creación de una marca propia —‘Cocido Montañés’— y la organización de eventos que refuercen la identidad gastronómica del territorio. "Es que el cocido montañés nada tiene que ver con el cántabro. Ese es un cocido con alubia y este es con garbanzo, como tiene que ser. Nuestra seña de identidad, la carne curada, que le da un sabor especial".

Apoyo al sector hotelero

Además de promover la gastronomía, la cofradía se compromete a respaldar al sector hostelero local, pieza clave para el desarrollo turístico. Para ello, se pondrá en marcha también una feria gastronómica de carácter bienal, con el objetivo de visibilizar la oferta culinaria y atraer visitantes a este rincón leonés.

El proyecto cuenta con una estructura organizativa sólida. Junto a Alvarado, el historiador Siro Sanz García asume el papel de altavoz y defensor del patrimonio turístico y cultural. Y los cofrades no solo comen cocido, además aspiran a consolidarse como motor dinamizador, buscando apoyos institucionales y financiación para desplegar su plan de acción. Bajo el lema 'De la iglesia la Espadaña y el Cocido en la Montaña', la asociación apuesta por una promoción integral del territorio, abarcando desde el Parque Regional Montaña de Riaño y Mampodre hasta los Picos de Europa, pasando por su legado arqueológico, su riqueza micológica y, sobre todo, su cocina tradicional.