Nuevas depuradoras de agua para Aleje, Huerga de Garaballes, Quintana de Rueda, Castrocontrigo y San Pedro Bercianos
La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio licita esta semana obras de depuración y abastecimiento de aguas que benefician a 166 municipios menores de 2.000 habitantes equivalentes, con una inversión de 40 millones de euros, tal y como avanzó hoy el titular del departamento, Juan Carlos Suárez-Quiñones, quien expuso que hoy mismo se ha publicado el primer contrato en la Plataforma de Contratación del Sector Público, a la que seguirán otros dos el jueves y viernes.
En resumen, serán 25 millones para depuración, otros 13 dos contratos para el programa ‘Gota a gota’, de abastecimiento, y algo más de 800.000 euros para la redacción de otro paquete de proyectos del programa para la renovación de las redes de abastecimiento de agua potable y mejora de la eficiencia en poblaciones de Castilla y León.
En declaraciones recogidas por Ical, Suárez-Quiñones se refirió en primer lugar a los programas de depuración de aguas residuales, para los que hoy mismo se han licitación 46 obras en todas las provincias, excepto Palencia, con un presupuesto de 25,3 millones de euros.
Depuradoras en la provincia de León
Las depuradoras se ubicarán en El Raso (Candeleda), Las Berlanas, Navalosa, Riocabado, en la provincia de Ávila; Olmedillo De Roa, Adrada de Haza, Baños de Valdearados y Quintanilla del Agua (Quintanilla-Tordueles), en Burgos; Aleje (Crémenes), Huerga de Garaballes (Soto de la Vega), Quintana de Rueda (Valdepolo), Castrocontrigo y San Pedro Bercianos, en León; Monte la Rad (Galindo y Perahuy), Gomecello, San Muñoz y Fuentes de Béjar, en Salamanca; San Pedro de Gaíllos, Muñopedro, Espirdo, Samboal, Santiuste de San Juan Bautista, Montejo de Arévalo, Aldealengua de Santa María, Valle de Tabladillo, Adrada de Pirón, Santo Domingo de Pirón, Gallegos y Brieva, en Segovia; Almarail, Ituero, Lubia, Rabanera del Campo y Cubo de La Solana, en Soria; Pesquera de Duero, Pozal de Gallinas, Villagarcía de Campos y Villalar de Los Comuneros, en Valladolid; y Pobladura de Aliste (Mahide), Moraleja de Sayago, Algodre, Pozoantiguo, San Cebrián de Castro, El Cubo de la Tierra del Vino, Entrala y Brime de Urz, en Zamora.
Todos los núcleos de población beneficiados carecen de sistemas de depuración adecuados para el cumplimiento de los parámetros establecidos en sus autorizaciones de vertido a cauce público, tal y como explicó el consejero, quien insistió en el objetivo de aguas residuales cero. “No sé si habrá alguna región europea con un compromiso ambiental tan ambicioso, sin precedentes. Ello mejorará la oxigenación de las aguas y las poblaciones de peces”, indicó.
Las nuevas depuradoras se han diseñado en función de estos parámetros y de las características específicas de cada población. Entre las tecnologías empleadas se encuentran los tanques imhoff, humedales artificiales, biofiltros y biodiscos. Todas ellas se caracterizan por tener un bajo impacto visual y un reducido coste energético en su explotación. Además, en cada núcleo urbano, la tecnología empleada ha sido elegida en función de las características del entorno.
Programas de depuración en Castilla y León
En segundo lugar, Suárez-Quiñones recordó que el 9 de octubre de 2020 se firmó el Protocolo General de Actuación entre la Junta y las nueve diputaciones provinciales, para promover sistemas de depuración de las aguas residuales urbanas en los núcleos con población de 500 a 2.000 habitantes equivalentes. En la actualidad, incluye 221 núcleos, con una dotación financiera de 127 millones de euros a compartir entre la Junta de Castilla y León (40 por ciento), diputaciones (40) y ayuntamientos (20), una cantidad que finalmente se eleva a 150 millones para el mismo número de actuaciones.
Actualmente, 18 plantas están en funcionamiento (nueve millones de euros); 111 en ejecución (69 millones), 25 en licitación (20 millones), 17 pendientes de convenio (12 millones) y 50 en proyecto, para las que aún no se establecer una estimación económica. “Todo ello con la actividad, empleo y obra pública que supone”, ensalzó el consejero.
Además del programa 500-2.000, la Consejería inició en 2023, también junto con diputaciones y ayuntamientos y con el mismo esquema, el desarrollo de un segundo programa para núcleos con población inferior a 500 habitantes-equivalentes, con el objetivo de construir 1.300 instalaciones (que finalmente serán 1.010), con una inversión de 125 millones de euros, en el periodo 2024-2027. En este tramo hay ya nueve infraestructuras en ejecución (3,5 millones), 21 licitadas (cinco millones), 34 pendientes de convenio (seis millones), 435 en proyecto y 511 pendientes en cola
Renovación de redes
En último lugar, aludió a la firma, el 6 de mayo de 2024 , de un protocolo de actuación también con las diputaciones, para la renovación de redes de abastecimiento y mejora de la eficiencia en la gestión del agua potable, que incluye la reposición de tuberías de fibrocemento y dañadas, mejoras en la sectorización, bajadas de presión, cambios de elementos de control y válvulas obsoletas, entre otros, con el objeto de mejorar el funcionamiento de la red de abastecimiento en cada núcleo y reducir las pérdidas de agua un 30 por ciento. En algunos casos, señaló el consejero, se pierde hasta la mitad del agua en las redes.
Hasta el momento, el programa incluye 211 núcleos, con una dotación financiera de 90 millones de euros entre la Junta (60 por ciento), diputaciones y ayuntamientos (20 por ciento en cada caso). En este protocolo se estableció la creación de un grupo de trabajo para seleccionar las actuaciones a desarrollar.
La Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente (Somacyl) se encarga de la ejecución de las actuaciones y la operación y mantenimiento de los contadores con telelectura y la plataforma común de gestión y facturación durante 25 años.
El programa se encuentra en fase de desarrollo técnico. A día de hoy, se contabilizan 35 obras con el proyecto finalizado y convenio aprobado por los ayuntamientos, que son las correspondientes a la licitación de esta semana. Se suman otros 42 en redacción, 85 actuaciones en fase de licitación de la redacción de los proyectos y 49 en análisis.
Suárez-Quiñones anunció la publicación, este 7 de febrero, en la Plataforma de Contratación, de la licitación de dos contratos que agrupan la construcción de estas 35 obras de renovación de redes de abastecimiento y mejora de la eficiencia en la gestión del agua potable en la provincia de Valladolid. Un contrato en municipios de la Mancomunidad de Campos Góticos (Medina de Rioseco), por importe de 3,3 millones, y otro en la de Vega Duero (Tordesillas), por 9,7 millones.
Estas obras ya cuentan con la tramitación finalizada y con aprobación municipal. La licitación se corresponde con la parte de obra civil y de comunicaciones comunes y, posteriormente, cuando la obra esté en fase de finalización se instalarán los contadores domiciliarios de lectura automática y las conexiones a la plataforma de gestión. Ya han sido realizados trabajos previos en las redes de todos los núcleos tales como inventario de red (incluida la detección de fugas), cartografía y generación de plano en GIS, así como la modelación matemática de las redes mediante EPANET.
También se ha realizado un inventariado del parque de contadores, cruzado con el padrón municipal, en el que se indica pormenorizadamente el estado de cada acometida y contador con el fin de regularizar la situación en cada población y eliminar irregularidades.
Plataformas multitecnología
En la actuación se incluirán los contadores domiciliarios y de sectorización con sus sistemas de comunicación, con una plataforma multitecnología, que permitirá la mejor gestión municipal de sus consumos, así como la facturación de su padrón de agua. Esto beneficiará al usuario, que tendrá acceso remoto a su consumo en tiempo real, y multitud de alarmas de consumos excesivos (fugas), o consumos cero (emergencia personas mayores), etc. Estas últimas actuaciones no están incluidas en la presente licitación y serán objeto de un concurso posterior global para todas las actuaciones del programa en Castilla y León.
Por último, Suárez-Quiñones dio a conocer también la licitación, el 6 de febrero, de la redacción de un segundo paquete de proyectos de este programa, con una inversión de 842.160 euros, que beneficiará a 85 municipios de todas las provincias, excepto Ávila.
El objetivo es realizar un análisis exhaustivo de las redes interiores municipales (presiones, funcionamiento, materiales, fugas etc..), así como una auditoría del parque público de contadores En base a este análisis, se programan actuaciones de sustitución de tuberías de fibrocemento, obsoletas o en malas condiciones, así como la renovación de todos los contadores de abastecimiento individual por otros con telelectura.
Son objetivos prioritarios de estos proyectos los núcleos incluidos en abastecimientos mancomunados o que disponen de potabilizadora municipal, en los que la eficiencia del ciclo hidráulico se hace más necesaria. El objetivo final es conseguir una reducción media de pérdidas en la red de abastecimiento de un 30 por ciento. Los proyectos licitados generarán actuaciones por un importe previsto de 36 millones euros.
Dificultades de las empresas
El consejero vaticinó que estas obras “deberían estar todas terminados o con obras a punto de terminar” en 2026 y avanzó que las licitaciones de esta semana “no serán las únicas, sino que se reunirán en paquetes de licitación para que resulten interesantes para las empresas, a lo largo del año”.
Precisamente, admitió que la Administración “sufre problemas generales” ante las dificultades de las empresas que “renuncian y paralizan obras”, lo que obliga a “resolver y volver a licitar, lo que retrasa la finalización de la obra”. Sin embargo, defendió que el tejido regional es “serio y las están sacando adelante”, a pesar “de las vicisitudes”. En todo caso, explicó que se ha reducido el número de empresas que pueden acometer “tanta obra pública”, afectadas por el “panorama que dejó la burbuja inmobiliaria, el Covid, la crisis de los materiales, la guerra de Ucrania, etc”.
“Si licitas menos de diez viviendas es difícil para las empresas”, comentó Suárez-Quiñones, quien puso como ejemplo un plan en Medina de Rioseco (Valladolid), con una obra para cinco viviendas que “ha habido que licitar cuatro veces hasta que ha resultado interesante para las empresas”, un problema que extendió a toda Europa en los últimos años. Para el caso de las obras de abastecimiento y depuración, las empresas que las ejecutan “son muy especializadas”, con lo que “se reduce la cifra de aquellas que las pueden llevar a cabo y por eso se agrupan las licitaciones”.