Nazareno, telonero

Confieso, y este verbo dado el caso tiene su miga, que la percha del asunto de hoy me viene un poco grande. Misión habitual de tertulianos y columnistas es meterse en jardines a los que nadie les llama. Así que me lanzo confiado en no desmerecer el propósito.
Y es que el Señor no me ha llamado por el camino de la Piedad, entendida como práctica religiosa, que de ejercicio de piedad más que actor debo ser objeto: apiádese el sufrido lector de los malos oficios de este “juntaletras”.
Y vale ya de prosopopeya y ditirambo. Leo que la leonesa Cofradía del Dulce Nombre de Jesús Nazareno participa en Roma del Jubileo, para los profanos una reunión internacional de cofradías con motivo del Año Santo Jubilar. Entre las varias actividades destaca una procesión de diversas cofradías, cada una de la cuales ha elegido una imagen señera y destacada para procesionar. Como no podía ser de otra manera, los leoneses han escogido a su Nazareno. Bien, o no tan bien, porque parece ser que en la página oficial en España del Jubileo, organizada desde Andalucía, que en esto de la Semana Santa española tiene internacional patente de corso, nuestro Nazareno figura integrando una “preprocesión”, una suerte de “teloneros” de las “grandes imágenes”, el “Cachorro” de Sevilla o la “Esperanza” de Málaga. No me queda muy claro que es una “preprocesión”, ni un “predesfile”, sino es procesión que no procesiona o desfile que no desfila. En fin, que la cosa parece basada en hacer distingos y que haya procesionantes de primera y segunda. Lo de ser de segunda ya saben ustedes a quién le toca por costumbre, a éstos de León, ciudad por cierto “castellanoleonesa” en la página del Jubileo de España.
Queda tiempo para aclarar las cosas y organizar la procesión por su orden, no dando más importancia a una imagen o a otra, teniendo en cuenta que son distintas representaciones de las mismas sagradas figuras. Lo que ya se hecha en falta es decir que León es ciudad leonesa y ya, que esto de la autonomía y las dos regiones cuesta un triunfo que entre en las molleras, más cuando desde la autoridad autonómica lo que se pretende es que acabemos siendo todos castellanoleoneses, que es como decir que la macedonia es de “melocotonperas”, un fruto nuevo muy sabroso.
Y al hilo de este Nazareno telonero, el meollo: los conciertos organizados por la Junta de Castiga a León desde su “Fundación para la Promoción de los Valores y la Identidad de Castilla y León”, que para ser un chiringuito con todas las de la ley ya nos hace gastar ríos de tinta con un nombre tan largo como vacío, que la tarjeta del director general de turno debe ser tamaño dinA4 o desplegable para que quepa semejante “ringorrango”.
Este año han echado el resto y contratado a artistas incontestables para asegurar el éxito de convocatoria. En Ponferrada tendremos a “Camela” y en León a “Juan Magán”. Como teloneros, gente de la tierra, Gekko en Ponferrada, joven banda pero con bastante oficio en esto del blues, rock y funky, y en León a José Manuel Mures, un referente musical imprescindible y con una larga historia a sus espaldas. Teloneros impecables... y ahora me vienen a la memoria los “Prieto Picado”, la banda que en el 2024 aceptó en primera instancia la invitación de la Junta para su actuación en la Explanada de los Pendones, a mayor gloria del marco y el simbolismo del sojuzgamiento de León al gobierno autonómico. A estas alturas pero del año pasado este grupo musical había recibido tantas presiones que decidieron no participar en el evento y se suspendió el concierto. Pobres músicos, que cometieron el error de querer tocar y que alguien les pagara, cosa que no ocurre con la frecuencia que debiera. Perdona a tu pueblo, Señor. Me pongo piadoso.
Por lo que parece este año, y dada la proyección y previsible éxito de público parece más difícil un boicot, que tampoco es deseable. Les auguro buena entrada, sobre todo porque es gratis... para los asistentes. Porque para las arcas públicas son una auténtica sangría, ya que todo indica que se va a pagar más del doble del caché habitual a los dos artistas. Por el presupuesto global cualquier promotor podría hacer un autentico “Woodstock” con formaciones leonesas, que sí destacarían los valores leoneses. Porque ahora, y esto es sólo opinión de un tipo bastante ecléctico musicalmente, que echó los dientes a la vida escuchando pop, rock, blues, soul, funky, que va desde Hildegard von Bingen hasta “The Prodigy”, de Conchita hasta “Dead Can Dance”, y no me las quiero dar de “enterao”, y desde el máximo respeto a cualquier artista que plasma en sus obras sentimientos y saberes, reconozco que no puedo ser muy ecuánime en la crítica meramente musical. A Camela los considero entrañables, inventores de la “Techno Rumba”, porque los vinculo a las atracciones de feria, música de “auto-choque”, de ritmo trepidante, pegadizo y con letras simples pero sentidas. Con Juan Magán no me pasa lo mismo. Siento no poder ser ecuánime ni objetivo. Me resulta muy difícil cuando a la vez me sangran los oídos.
Si de verdad quieren saber lo que son leoneses haciendo buena música, no dejen de acercarse los días 2 y 3 de mayo al Teatro El Albéitar, donde los “Goodman Collective” celebrarán el décimo aniversario de la grabación del directo #WONDERING.
Si me dejo alguno, por favor que me perdone: Diana Majo, Bruno Arias, Mario Morla, John Bramley, Juanjo Castellanos, Mark Gibson, Iván “Taca”, Rubén Díaz, Pepe López, Andrea López, Sonia Rubín, Javier Arias, Javier Baíllo, Juan Gallardo, Salomones Brothers, manuel Machado y Víctor Jiménez.
Éstos sí que sí.
Y otra cosa que también: la iniciativa para que el presupuesto que la inicua Fundación para la Promoción de los Valores y la Identidad de Castilla y León destina a estos conciertos tenga como fin la dotación del Hospital del Bierzo.
Eso sí son valores: búsquenla en change.org. Que rule.