Alsa Rail multiplica su actividad mejorando su parque de material para el movimiento de mercancía pesada

Alsa Rail multiplica su actividad en el movimiento de mercancías y mejora su parque de material. La compañía, que ve en la Variante y en Pajares dos elementos clave de su desarrollo incorpora locomotoras Euro 6000, que permitirán multiplicar las conexiones ferroviarias y los servicios.
Con un importante salto cualitativo y cuantitativo en el parque de material de Alsa Rail se incorporan cuatro locomotoras Euro 6000 de Stadler Rail que se suman a la flota de la operadora privada.
El creciente volumen de su tráfico mercante bajo catenarias les ha animado a dar este paso. Las otras tres, alquiladas también a Alpha Trains, irán llegando de aquí al verano.
La rampa de Pajares y la Variante forman parte de la logística de futuro que se plantea en Alsa Rail, una compañía que trabaja en dos vías, trenes de mercancías y turísticos.
Mercancías
En el caso de Pajares el valor histórico de la infraestructura es una de las claves para conseguir dar una segunda vida a esta línea de ferrocarril cuya actividad se ha reducido de forma notable tras la apertura al tráfico de la Variante de Pajares.
De ahí la importancia de la apuesta de Alsa, nuevo operador ferroviario, quien ha fijado la mirada en esta singular pendiente en las comunicaciones a través de la Meseta.
Hace casi un año Renfe Mercancías provocó la gran transición, ordenando que todos sus trenes de mercancías dejaran de usar la decimonónica infraestructura para aprovechar la variante de Pajares.
Desde entonces su única actividad en la rampa es un tren regional por sentido, que hace alto en ocho estaciones entre Campomanes y La Robla e invierte casi dos horas en superar ese tramo.
Alsa ha querido aprovechar ese vacío con trenes turísticos puntuales y servicios de mercancías regulares. La compañía de transporte ve rentable trabajar el paso por esa línea por mayor disposición de horarios y podría multiplicar por cuatro su actividad actual.
La Rampa
Desde Busdongo hasta Puente de los Fierros hay una sucesión de 63 túneles, de los que cuatro son artificiales. En su inauguración, el tramo tenía 61 túneles, totalizando el recorrido subterráneo casi 25 de los 42 km del recorrido (60 % de la longitud del tramo). De ellos, seis superan la longitud de 1000 metros: La Perruca, con 3072 metros; La Pisona, 1050 metros; La Sorda, 1076 metros; Congostinas, de 1170 metros; El Capricho, de 1838 metros; y Orria, de 1057 metros.
El de La Perruca, es recto y está situado entre los municipios de Villamanín (provincia de León) y Lena (provincia de Asturias). Fue calado en mayo de 1883; su perforación se hizo manualmente y con la ayuda de perforadoras de aire comprimido como las utilizadas en la excavación de túnel de San Gotardo. La excavación se efectuó desde las dos bocas y en los frentes creados en tres pozos intermedios. Al término de su construcción era el túnel de mayor longitud construido en España.
Desde 1884 se han construido varios túneles artificiales para proteger la vía férrea de las avalanchas de nieve en los puntos más conflictivos.
La Variante
Si Pajares es importante no lo es menos la Variante, donde Alsa Rail quiere competir con mercancías y quizá, en algún momento, con pasajeros.
La variante de Pajares es el principal tramo de la línea ferroviaria de alta velocidad León-Asturias en España, que atraviesa transversalmente el complicado relieve de la cordillera Cantábrica.
Se inicia en La Robla (León) y finaliza en la estación de Pola de Lena (Asturias), y cuenta con una longitud total de 49,7 kilómetros. De doble vía y desarrollada para Alta Velocidad, la infraestructura soporta mercancías y será clave en el futuro Corredor Atlántico, en cuyo desarroyo Alsa Rail quiere estar presente.