Cendón-Moreno: 'Guerra de cifras', el factor 'Diez' y la dura pugna por cada voto

En pocas ocasiones la pugna por la dirección provincial de un partido se había visto tan extrema. Ni siquiera en noviembre de 2017 cuando Javier Cendón y Diego Moreno se subieron al ring político en un primer asalto que ahora tiene su continuidad.
Hoy, las posturas de uno y otro son más enconadas. Influyen múltiples factores. Para el equipo de Cendón la decisión de presentarse de Moreno es una 'deslealtad' entendida como una respuesta no esperada a lo que el propio secretario provincial apuntaba como un sincero compromiso "por la integración" durante los últimos años.
"Se buscó por parte de Javier (Cendón) un acercamiento a los críticos, dándoles un protagonismo institucional enorme con el fin de que el partido estuviera unido y remara en la misma dirección, pero ahora su respuesta a esa mano tendida ha sido presentarse sin ni tan siquiera avisar", remarcan en su entorno.
La hoguera del enfrentamiento
A la hoguera del enfrentamiento se ha echado más gasolina con la presencia de Andrea Fernández, diputada nacional y en otro tiempo mano derecha del propio Javier Cendón. Andrea, mantienen las fuentes socialistas, se alejó del secretario general en Madrid. En Ferraz, más concretamente. Allí se inclinó por dar apoyo a quienes mantenían una postura más crítica con Pedro Sánchez; Cendón, fue más fiel al presidente, y a Zapatero.
La alianza de la diputada leonesa con Moreno, "con los críticos", ha alimentado el enfrentamiento entre las dos facciones del socialismo leonés.
Así las cosas, no hay punto de encuentro. En la vertiente oficialista se advierte que en las últimos días Diego Moreno ha tendido un puente hacia Cendón tras una invitación de la dirección autonómica al consenso y la serenidad. La respuesta ha sido un "no" rotundo. Ni acuerdo, ni pacto, ni nada... "Les vamos a arrasar", se remarca.
El leonesismo y el 'factor Diez'
Al otro lado se encuentra Diego Moreno, aspirante como en 2017 pero con menos posibilidades de un acuerdo político tras la cita con las urnas. Él recurre al 'factor Diez' como aval. Al descontento socialista y a la bandera del leonesismo como nexo de unión.
Pero no parecen, por el momento, muchas armas para tumbar al rival. En el propio PSOE algunos militantes dudan de lo que llaman un "leonesismo improvisado" cuando fue él "quien llamó a los ayuntamientos cuando se votaban las mociones leonesistas para que no se apoyaran".
Mientras, José Antonio Diez, el único militante socialista que puede presumir de haber tumbado ampliamente a Cendón en las urnas cuando éste lideró una revuelta para tomar al asalto la agrupación de León, muestra su apoyo a Moreno en la confianza de ganar cuota en el partido a nivel provincial.
La balanza y los votos
"Nosotros vamos paso a paso, confiamos en el voto de las bases. Hay un agotamiento claro con Cendón y no creemos que los militantes sean capaces de ir a votar a Cendón tapándose la nariz", aseguran.
Diez le suma a Cendón entre 600 y 800 votos de la capital. Son muchos, pero quedan otros 1.200 votos por captar. Y ahí el aparato del partido es una maquinaria muy robusta. Tanto, que suele resultar demoledora.
Las cifras extraoficiales de avales hablan de 1.931 en manos de Cendón y 650 para Diego Moreno (de ellos 476 validados). Mucha diferencia y mucha inclinación en la balanza. "Pero los avales no son los votos", se advierte a renglón seguido. Las espadas, por el momento, siguen en todo lo alto.