El Molino Sidrón resurgirá como espacio patrimonial y aspira a ser el corazón cultural de León
El Ayuntamiento de León arrancará en junio las obras de rehabilitación del Molino Sidrón, una de las actuaciones de recuperación del patrimonio más ambiciosas de la ciudad en los últimos años. Este antiguo molino hidráulico, enclavado en la Era del Moro, junto a la muralla romana, se convertirá en un nuevo espacio cultural abierto a la ciudadanía. La inversión, que superará el millón de euros, se financiará a través de los fondos europeos Next Generation dentro del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino Ciudad de León.
La actuación permitirá no solo consolidar y rehabilitar el edificio, sino también dotarlo de contenido cultural, reforzando su papel como punto de encuentro para actividades vinculadas a la historia, el patrimonio y la cultura de la ciudad. El edificio, actualmente en estado de abandono y cubierto por la vegetación, conservará los vestigios de su estructura original, vinculada a un sistema hidráulico ya desaparecido pero que fue esencial en la vida económica leonesa durante siglos.


Congreso internacional sobre molinos
La recuperación del Molino Sidrón llega en un momento simbólico: León será sede en octubre del Congreso Internacional sobre Molinos Hidráulicos, un evento bienal que en su última edición, celebrada en Sevilla en 2023, reunió a decenas de expertos nacionales e internacionales.
El congreso, cuya jornada inaugural se celebrará precisamente en el entorno del Molino Sidrón, servirá para poner en valor el patrimonio hidráulico leonés. No en vano, la provincia llegó a contar con más de 2.000 molinos hidráulicos, si bien ninguno se mantiene hoy en día en uso comercial. Varios, como el Sidrón, se conservan gracias a iniciativas particulares o municipales.
La Universidad de León, a través de su rectora Nuria González, ha confirmado su participación y ha subrayado el valor patrimonial, etnográfico y académico de estas construcciones.


Un símbolo del León histórico
El Molino Sidrón es el único molino hidráulico que se conserva en la capital, de los 17 que llegó a albergar. Su historia está íntimamente ligada a la de la muralla romana, con la que comparte espacio e identidad. Su origen está en la molienda de cereal, aunque su uso fue variando con el tiempo hasta quedar relegado y olvidado, entre maleza y construcciones improvisadas.
Ahora, la recuperación del molino completará la transformación de este entorno, que ya ha ganado visibilidad tras la apertura al público del paseo peatonal por la muralla. La actuación se verá respaldada por su triple declaración de Bien de Interés Cultural (BIC): como parte del Conjunto Histórico de la Ciudad Antigua, del entorno del Monumento Histórico de la Muralla Romana y del Monumento Histórico del Castillo.
La Era del Moro aún conserva restos del canal original que movía las piedras del molino y elementos estructurales del edificio. Su rehabilitación no solo es una apuesta por el patrimonio, sino también por un modelo de ciudad que mira a su pasado para construir un futuro más sostenible, cultural y participativo.