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El rechazo de todo León a la violencia machista se deja ver en una nueva concentración

Representantes de todas las instituciones públicas se citan para mostrar su repulsa por el último crimen machista confirmado en Las Palmas
Imagen de la concentración celebrada este lunes a las puertas de la Subdelegación del Gobierno de León. Foto: Ayto de León
Imagen de la concentración celebrada este lunes a las puertas de la Subdelegación del Gobierno de León. Foto: Ayto de León

El rechazo de todo León a la violencia machista se deja ver en una nueva concentración. Representantes de todas las instituciones públicas se citan para mostrar su repulsa por el último crimen machista confirmado en Las Palmas.

Durante el minuto de silencio en la Subdelegación del Gobierno han estado presentes representantes de esta administración, además de Junta, Diputación y diferentes ayuntamientos, además de vecinos de la ciudad.

El último crimen ha sido sumamente cruel. El agresor creyó cometer el crimen perfecto y durante cinco años consiguió ocultarlo. 

El crimen

Miguel Gallego Pousada preparó toda su coartada, escondió pruebas e inventó versiones que le funcionaron durante un lustro. María Dolores Illan Méndez, Loli, su mujer, y él discutieron el 18 de marzo de 2020 en el piso donde residían en Playa del Inglés desde hacía seis años, cuando se mudaron a Gran Canaria desde Cataluña, donde él era guardia civil. 

Ella lo abofeteó y él se fue de la vivienda. Cuando regresó, Loli ya no estaba. Solo encontró una nota de despedida en la que le pedía que no la buscara, que no quería saber nada de él ni de su familia. Su desaparición fue voluntaria, dijo, pero todo esto era mentira.

"Discutimos, se desnucó y la descuarticé en trozos pequeños, de unos cinco centímetros", confesó este martes, durante el interrogatorio. Pero hubo más, ante los agentes se mostró colaborador y dio detalles de cómo se deshizo de las pruebas y, sobre todo, de los restos de Loli.